El Dinamarquero, un emprendimiento familiar que quiere seguir creciendo
Por: Marisol Retamal
Un día antes de Fiestas Patrias, el 17 de septiembre pasado, abrió sus puertas El Dinamarquero, emprendimiento familiar ubicado en calle O´Higgins 694-B.
Se trata de una apuesta liderada por Raúl Lira Morales, quien atiende el negocio en alianza con sus hijos María Isabel y Raúl Lira Fernández.
Es María Isabel quien apoya directamente las gestiones de Raúl padre. El local funciona de lunes a viernes de 10 a 13 horas y de 15,30 a 20 horas, mientras que los sábados la atención va de las 10,30 a las 13 horas y de 16 a 20 horas.
“Algo más que aliños” parece ser el lema de El Dinamarquero, nombre que surgió para rescatar el recuerdo de un hotel que la familia tuvo años atrás en el sector de Oazy Harbour. Es que el negocio partió con una amplia variedad de aliños provenientes de distintos países. Y a partir de ahí ha sido el público el que ha comenzado a sugerir y solicitar otros productos que se han unido a la oferta del local.
“Como se trata de un proyecto familiar acá todos participan y todos colaboran. Aprovechamos las sugerencias de quienes nos visitan y eso nos ha servido para ir creciendo”, comenta María Isabel.
“En nuestra familia se da la casualidad de que todos estamos unidos a la cocina y, de hecho, los hombres cocinan mejor que las mujeres”.
A los condimentos de distintas etnias se sumaron productos para celiacos y alternativas como aceite de coco, leche de cabra, salmón ahumado o jamón serrano. La idea, en el fondo, es innovar con opciones para todos los gustos. En este ítem se encuentra la miel con Cannabis que llegó recientemente y que ha generado interés entre los clientes.
“Lo bueno es que gracias a la publicidad que hemos contratado, al Facebook y al boca en boca nos hemos ido difundiendo y cada vez viene más gente al local”, señala.
Otro valor agregado son los postres caseros, las tortas, galletas y pastelitos a pedido que María Isabel realiza y ofrece al público. Como carta de presentación de su trabajo, comenta que durante años ella se encargó de elaborar la pastelería del Restaurante Damiana Elena, perteneciente a su primo Julián Fernández. “En nuestra familia se da la casualidad de que todos estamos unidos a la cocina y, de hecho, los hombres cocinan mejor que las mujeres. Así que con este negocio estamos apuntando a una cosa familiar pero también ligada con la cocina y los buenos sabores”, agrega María Isabel.
