Cómo preparar a los niños y niñas para su primer día en el jardín infantil

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Fundación Integra, a través de sus profesionales especialistas en infancia, entrega recomendaciones para que los niños y niñas descubran, aprendan y sean felices en este nuevo mundo de la educación inicial.

En el jardín infantil los niños y niñas comparten con sus pares, desarrollan habilidades, viven experiencias significativas, despiertan su creatividad, se relacionan con el medio natural y cultural, generan sus primeros vínculos afectivos y descubren el mundo. En el jardín infantil los niños y niñas aprenden, principalmente, a través del juego, la actividad por excelencia de la infancia.

Comenzar la etapa de educación parvularia es una experiencia nueva, tanto para los adultos como para nuestros hijos e hijas, por eso, es importante preparar y acompañarlos en el camino de este aprendizaje, de manera de facilitar su adaptación y, lo más importante, que sean felices.

La psicóloga Karen Aguilera, asesora técnica del departamento Educativo de Fundación Integra Magallanes, explica que los niños y niñas viven diferentes procesos de adaptación ante situaciones de cambio, en este caso, el ingreso al jardín infantil. “Todos los niños tienen características y dinámicas familiares distintas, lo cual es importante tener en cuenta a la hora de generar un proceso de preparación de los hijos y adultos significativos para el ingreso al jardín infantil”, afirma.

En este sentido, “es importante incorporar con antelación algunos hábitos en los niños y niñas, como los horarios de alimentación y de sueño, hábitos de higiene, generar instancias de encuentro con otras personas fuera de su entorno familiar inmediato, de manera que les permita irse familiarizando con la dinámica propia de un jardín infantil”, asegura la profesional de Fundación Integra.

También es importante que los niños y niñas conozcan previamente el jardín infantil donde asistirán durante el año y comentarles qué pasará en ese lugar: conocerá nuevos amigos, jugará con ellos y aprenderá cosas nuevas. “Ir fomentando una expectativa positiva en los niños en relación a este nuevo lugar, destacando todo lo que puede aprender y descubrir de sí mismos y de otros”, complementa Karen Aguilera.

La asesora de Fundación Integra plantea que los jardines infantiles deben ser de puertas abiertas, favoreciendo una comunicación fluida y cercana entre las familias y su personal. “Es importante que las familias transmitan toda la información necesaria acerca de sus hijos e hijas para que favorezcan su proceso de adaptación, tales como: hábitos alimenticios, abordaje ante ciertas conductas, indicaciones médicas, etc”.

Otro punto dice relación con una de las situaciones más frecuentes en el primer día de jardín infantil: el llanto. “Es natural que los niños y niñas manifiesten sus emociones a través del llanto, ya que están expuestos a un entorno desconocido para ellos, lo importante es contenerlos, abrazarlos, conversar con ellos y, en la medida de lo posible y en coordinación con la directora o educadora, permanecer algunos minutos en sala para acompañarlos”, asegura la psicóloga.

 

Recomendaciones de Fundación Integra a las familias:

– Algunas semanas antes cuéntale que comenzará una nueva etapa de su vida: conocerá a otros niños, compartirá y jugará con ellos, aprenderá junto a las “tías”.

 

– Muchos niños se sienten más seguros con algún objeto familiar o de apego que les ayuda a sentirse confiados en un espacio menos conocido.

 

– Con frecuencia para lograr que se tranquilice en el momento del ingreso, algunos adultos recurren a promesas que no pueden cumplir (por ejemplo: “voy a comprar y vuelvo”). Sin embargo, el niño o niña inevitablemente se dará cuenta de que lo están engañando, lo que le generará más inseguridad y desconfianza.

 

 – Si es posible, en los primeros días acompáñalo un par de horas en el jardín infantil para facilitar su adaptación.

 

– Es recomendable que la asistencia sea lo más continua posible (ojalá todos los días). Muchas veces frente a la ansiedad de los niños, los padres deciden dejarlos en casa, lo que dificulta la adaptación a esta nueva etapa.

 

– Pregúntale a diario cómo lo está pasando en el jardín y qué ha aprendido. Manifiesta siempre tu interés en sus opiniones e inquietud.

 

– La invitación es a observarlos, conversar con ellos y tomar en cuenta sus emociones. Recuerda que nadie mejor que tú conoce a tu hijo o hija.