Cuidados de la piel y Envejecimiento

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Dra. Fernanda Deichler V.
Cirujano Plástico, Estético y Reconstructivo
Pontificia Universidad Católica de Chile
Miembro de la Sociedad Chilena de Cirugía Plástica

 

El envejecimiento produce cambios paulatinos en nuestro cuerpo. Las zonas mas expuestas y que reflejan la mayor parte de estos cambios son la cara y el cuello.
La forma en que vamos envejeciendo y sus manifestaciones dependen de factores genéticos y ambientales. Dentro de los factores ambientales que más influyen en el envejecimiento están: la exposición solar, tabaquismo, tipo de dieta y cuidados de la piel.
Los cuidados precoces de la piel son fundamentales para combatir los estigmas propios del envejecimiento, estos incluyen:

–    Protección solar : La radiación solar es uno de los mayores enemigos de la piel y su juventud, pues destruye sus fibras elásticas y, además de ser un factor carcinogénico, promueve la formación de manchas oscuras, otro signo de envejecimiento. El 50% de las arrugas faciales son derivadas de la exposición solar. Es fundamental precozmente el uso diario de protector solar con Factor 50, durante todo el año y, al menos, 3 aplicaciones diarias.
–    Evitar el tabaco: La nicotina acelera el envejecimiento cutáneo, tanto así que la piel de un fumador se nota a simple vista. Es más delgada y reseca, tiene los surcos más acentuados, con un color medio amarillento y con manchas en la piel de color café.
–    Dieta equilibrada : Un régimen alimentario balanceado incluye todos los elementos nutritivos necesarios para la buena salud y, al mismo tiempo, puede retrasar la aparición o avance de los signos de envejecimiento.
–    Uso de productos dermocosméticos: Los productos antienvejecimiento, sobre todo desde los 30 años, son muy recomendables especialmente para cuello, rostro y contorno de ojos. Ayudan a la regeneración celular y a suavizar arrugas finas. Principalmente aquellos que contienen factores de crecimientos; que ayudan a la regeneración de colágeno, elastina, fibronectina y ácido hialurónico, siendo este tipo de productos lo más innovador en tecnología dermocosmética antienvejecimiento.

El cuidado precoz de la piel (protección solar, uso de dermocosméticos), asociado a procedimientos mínimamente invasivos, como la aplicación de toxina botulínica y ácido hialurónico, permite combatir de forma segura y eficiente los trastornos propios del envejecimiento, dándole al paciente una solución estética adecuada a sus requerimientos.