Orgasmo femenino, todo un derecho

1 Comment

Por años denegado a las mujeres, el placer sexual es algo natural y consustancial al género femenino. Pudores, concepciones filosóficas y religiosas, tapujos y estigmas culturales han conspirado por siglos en desmedro de tal beneficio para el cuerpo y el alma de cada una.

Pocos saben que el 8 de agosto de la semana pasada se celebró el Día Internacional del Orgasmo Femenino, instaurado hace ocho años en Esperantina, Brasil, por un concejal que, demasiado afanado por el trabajo y otros menesteres, se sabía en deuda con su mujer en el ámbito amatorio.

Por ello, instituyó ese día para que todos los varones se dedicaran en forma exclusiva a provocar, al menos, un orgasmo a sus respectivas mujeres. De allí, esta celebración se extendió a México, Argentina, Perú, España, Noruega y Dinamarca.

Incluso, en Ecuador, una legisladora ha abogado por dictar una ley que consagre al orgasmo como un derecho para las mujeres. Y plantea penas para los infractores…

Más de alguien lee estas líneas con cierto pudor; otros las abordan con sorna. Pero, el placer sexual y, en particular, alcanzar un orgasmo es algo de lo cual se debería hablar más si se considera el bajo índice de mujeres que admiten haber tenido algún clímax en su vida y la alta tasa que reconoce que, para no herir a su pareja, prefiere simular.

En México, la mitad de las mujeres jamás ha sentido alguno; en Argentina, el 30% señala que logra dicha explosión con mucha dificultad y el 70% se resigna a fingir.

Conocer mejor el cuerpo, explorar mutuamente las zonas erógenas y quebrar la incapacidad de dialogar con la pareja son algunos de los consejos para combatir la anorgasmia femenina.

 

Elia Simeone Ruiz