Síndrome de excitación permanente, ni tan placentero como se podría pensar

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– Es una disfunción sexual que se caracteriza por un estado de excitación genital constante, que se transforma en un problema que padecen las mujeres y que, lejos de ser placentero, muchas veces es doloroso.

Una mujer norteamericana tiene 300 orgasmos diarios y recientemente se conoció la historia de una mexicana que llega a cien en un día.

Esto es una disfunción sexual que se conoce como síndrome de excitación permanente, respecto del cual recién se están realizando investigaciones.

Afecta principalmente a las mujeres y hace que se presente la excitación genital sin ningún estímulo sexual. Además, no siempre termina en un orgasmo, pero, cuando se llega a este punto, tampoco se siente un alivio.

Quienes sufren de este síndrome no disfrutan la condición, que puede presentarse en situaciones tan inesperadas como en el trabajo o en la fila de un supermercado.

Según la sexóloga Ana Sol Villagrán, lo más preocupante es que una persona con este tipo de disfunción no puede hacer sus actividades diarias sin sentir un orgasmo. “Si bien esta enfermedad no es muy común, las personas que la padecen, están prácticamente impedidas de trabajar o hacer cualquier tipo de esfuerzo, ya que con sólo caminar, pueden sentir dicha sensación, que también se asemeja a las ganas de ir al baño”.

 

Causas

Pero, ¿qué causa esta excitación espontánea y persistente? Aún no se conoce la respuesta exacta.

Se especula que puede tener causas vasculares, neurológicas o ser el producto de algún efecto secundario causado por un medicamento.

Las mujeres que sufren de este síndrome de excitación sexual persistente experimentan, tal como sucede durante las relaciones sexuales, aumento en la frecuencia cardíaca, respiración acelerada, contracción de la musculatura de la pelvis y todos los cambios del cuerpo que se prepara para el orgasmo.

Pero, a diferencia de lo que se cree, las mujeres que sufren esto no tienen mayor deseo de mantener relaciones sexuales y, muchas veces, sienten dolor con la penetración vaginal.