Apoyo mutuo, piedra fundamental en la lucha contra el cáncer

Con quince personas diagnosticadas de algún tipo de este mal y familiares, se está dando vida a la Agrupación de Pacientes Oncológicos de Magallanes, quienes hicieron suyo el llamado hecho por la doctora Edith Jofré de unirse, respaldarse mutuamente y trabajar en campañas de difusión y prevención.

De izquierda a derecha, Leydi Velasco y Melita Prado.

Jacqueline Cáceres (a la izquierda) y Alicia Gallardo.

Gloria Sagredo (a la izquierda) y Mónica Villarroel.

Elia Simeone R. revista@fempatagonia.cl

Un ambiente alegre nos sorprende. Un grupo de mujeres sigue con atención las instrucciones y tips de belleza que imparte la estilista Yesika Kuscic. Sus rostros, que traslucían su afección al momento de llegar, comenzaron a resplandecer y ellas, enfrentadas al espejo, fueron viendo cómo poco a poco y con ciertos trucos recobraban luminosidad. La coquetería natural resurgió y fue creándose una atmósfera especial.

Brotaron risas en un ambiente de camaradería que siguió creciendo en la medida que aprendían cómo disimular ojeras, marcarse cejas y pestañas dañadas, a agrandar los ojos y cómo aplicar correctamente el rubor a las mejillas.

Lo paradojal de la situación es que todas las asistentes al taller de Belleza y Autoestima eran mujeres que padecen algún tipo de cáncer y que, además de tener que enfrentar anímicamente tal diagnóstico, están sufriendo en sus cuerpos el impacto de las quimioterapias y la radiación.

“El autocuidado es esencial. Deben aprender a invertir tiempo en ello”, fueron los consejos que, tras el taller, les brindó la psicóloga Bárbara Huenchuguala, quien estuvo siguiendo atentamente cada paso de la sesión.

“Es esencial mantener el ánimo alto, pues ayuda a las defensas del organismo que, en estos casos, es tan fundamental. Sabemos que es propio de estas enfermedades tener un estado anímico bajo, pero con este tipo de actividades uno aprende que puede verse mejor y, con ello, uno se siente más feliz”, prosiguió la profesional.

Mientras todas las asistentes internalizaban sus palabras, Bárbara insistió en la necesidad de descansar y hacerlo “sin sentir culpa”, así como dedicar tiempo para el autocuidado son herramientas importantes para enfrentar de mejor manera esta patología.

“El tiempo para ustedes es esencial”, remarcó, pidiendo, luego, un gran aplauso para todas.

“Es esencial mantener el ánimo alto, pues ayuda a las defensas del organismo que, en estos casos, es tan fundamental. Sabemos que es propio de estas enfermedades tener un estado anímico bajo, pero con este tipo de actividades uno aprende que puede verse mejor y, con ello, uno se siente más feliz”, remarcó Bárbara Huenchuguala.

Nacimiento de la agrupación

La experiencia vivida fue motivadora y tuvo lugar en la víspera del 23 de enero pasado, fecha muy importante y deberá ser recordada, sobre todo por un conjunto de magallánicos que están unidos por una palabra: cáncer. Pero, lejos de desfallecer ante un diagnóstico tan abrumador, han decidido mantener su voluntad de luchar y de apoyarse, sacando fuerza de un momento crítico y entregándose aliento entre sí y también a quienes padecen algún tipo de esta enfermedad.

El martes 23 de enero de 2018 se constituyó la personalidad jurídica de la Agrupación de Pacientes Oncológicos de Magallanes, la que nació de la necesidad común de respaldo y al responder a un llamado que, en tal sentido, les formuló la doctora Edith Jofré, durante la ceremonia de la Semana de la Lucha contra el Cáncer, en octubre del año pasado.

Desde que hicieran suya tal invitación, estuvieron y siguen organizándose, buscando integrar a más pacientes y familiares.

Hoy, la presidenta de la agrupación, Pamela Ojeda, destaca que la entidad está conformada por quince personas aproximadamente y que tiene como objetivo brindar apoyo mutuo entre los pacientes y familiares que la conforman.

“Buscamos ser un lugar en donde se puedan compartir sentimientos y experiencias que muchas veces son difíciles de compartir con nuestras familias o amigos. Generar una dinámica de grupo que nos permita estar ocupados en actividades para un bien común y generar un sentido de pertenencia. Poder intercambiar información con respecto a terapias complementarias, experiencias en los tratamientos y situaciones prácticas asociadas al diario vivir de la enfermedad. Finalmente la idea es que los pacientes sientan que ya no están solos, somos muchos pasando por lo mismo”, remarca.

En este camino, han contado, afortunadamente, con el apoyo del Servicio de Oncología del Hospital Clínico de Magallanes y del Servicio de Salud de Magallanes, quienes les facilitaron material (folletería y pendón de cáncer de mama) para poder estar presentes en la Expo Maternidad y Crianza que se realizó en diciembre. Asimismo, realizaron talleres destinados a los pacientes, tales como Taller “Yoga de la Risa” (el 19 de enero), Taller de Belleza y Autoestima (el 22 de enero) y Taller de Cocina Colombiana (el 3 de febrero).

Además de Pamela en la presidencia, la directiva de la agrupación está constituida por Carolina Galindo, secretaria; Sandra Cabeza, tesorera; Víctor Hernández y Vilma Vidal, como directores.

A la hora de los agradecimientos, ellos quieren destacar al Hospital Clínico, pues les ha permitido utilizar sus dependencias para realizar talleres y por difundir, a través de sus relaciones públicas,  sus actividades. También, valoran especialmente a los profesionales de Oncología, porque los han apoyado en sus proyectos.

“Asimismo, agradecemos a Camila Oyarzún, nuestra terapeuta holística, quien colabora con el taller Yoga de la Risa; a Yesika Kuscic, por colaborar con el taller de Belleza y Autoestima y permitirnos realizarlo en su estudio. Agradecemos también al restaurante Damiana Elena y Esika Punta Arenas, por colaborar con los regalos para este último taller y, finalmente, a El Dolar Beauty Store por regalarnos un kit de maquillaje para cada una de las asistentes al taller”, individualizó.

Pamela Ojeda explica que este tipo de actividades se viene haciendo hace mucho tiempo, pero en Santiago, donde claramente hay mayores posibilidades de cooperación por parte de los empresarios. “Esperamos poder seguir realizando estos talleres que van en directa ayuda de nuestros pacientes y familiares”, instó.

Pamela Ojeda, presidente de la agrupación, junto a la psicóloga Bárbara Huenchuguala.

La imagen, un armar de autoestima contra el cáncer

Si ya recibir un diagnóstico oncológico resulta traumatizante, lo puede ser aún más tener que convivir con los cambios estéticos que se van registrando.

La belleza, la salud y la autoestima van ligadas y este vínculo cobra mayor importancia cada 19 de octubre, en que se conmemora el Día Mundial contra el Cáncer.

“¿Qué tiene que ver el cáncer con la minifalda y los tacones? No tenemos que vestir de enfermas, podemos ponernos un brillo en los labios, color en las mejillas y, si nos apetece, un pañuelo en la cabeza a juego con el vestido.

“No hablo de estar guapa, porque la quimioterapia es agresiva y el deterioro físico es brutal, pero sí de verte mejor y poner en marcha un círculo de positividad que influye en tu actitud frente a la enfermedad”, afirma Sandra Ibarra, modelo que ha plantado cara dos veces a la leucemia.

Si ya recibir un diagnóstico oncológico resulta traumatizante, lo puede ser aún más tener que convivir con los cambios estéticos que se van registrando…

Es, por ello, que hace un buen tiempo los profesionales sostienen que es importante mejorar la imagen y mantener un autocuidado durante y después de la enfermedad.

Hacer ejercicio y optar por algunos trucos cosmetológicos para disimular la pérdida de cabello, cejas y pestañas ayuda muchísimo. Igualmente, el optar por prótesis mamarias si se ha sufrido la extirpación de un pecho.

Cambio en las rutinas de belleza

En el sitio, www.lne.es, se puede encontrar un artículo escrito por Silvia Martín, en que se dan consejos sobre el cambio de las rutinas de belleza.

Allí se indica que, por ejemplo, hay que tener cuidado con la temperatura del agua. Las duchas, mejor cortas y con agua tibia o fresca y un jabón oleoso o de glicerina, con un ph similar al de la piel (de 5 a 5,5). Para secarse, es recomendable usar una toalla suave y dar pequeños toques en vez de frotar.

Se afirma que es aconsejable también cambiar la cosmética habitual para que incluya activos como el retinol o el ácido glicólico por otra más suave y neutra, rica en principios hidratantes y oxigenantes. Conviene elegirla sin perfumes, conservantes ni aditivos para disminuir el riesgo de aparición de reacciones cutáneas. En general, cuanto más corta sea la lista de ingredientes, mejor.

Un punto a considerar es que se debe hidratar la piel con sérums, cremas y lociones ricas en manteca de karité y mango y activos como el aloe vera o la urea en bajas concentraciones. Las vitaminas E y F y los aceites de rosa mosqueta y avellana son efectivos para calmar, regenerar y proteger.

Para desmaquillar, se recomiendan limpiadoras y tónicos libres de alcohol, a base de extractos botánicos naturales de manzanilla, flor de saúco y té verde.

El pelo y las uñas se debilitan mucho por los tratamientos. Hay que hidratar a menudo el cuero cabelludo, las manos, los pies y las cutículas, así como evitar gestos como cortar las cutículas y maquillarse las pestañas.

No es conveniente la exfoliación facial y corporal ni la aplicación directa de perfumes en las zonas operadas o radiadas ni el uso de desodorantes en la axila del pecho operado.