Lunares

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Dra. MARÍA Fernanda Deichler V., Cirujano Plástico,Pontificia Universidad Católica de Chile, Miembro de la Sociedad Chilena de Cirugía Plástica

MUCHAS PERSONAS se caracterizan por tener muchos lunares en distintas zonas del cuerpo, ya sean de nacimiento o adquiridos. Grandes, planos, negros, cafés, redondos o con bordes irregulares.

En ocasiones hay lunares y pequeños tumores benignos que no se justifica extraer desde el punto de vista médico, sin embargo, afectan la autoestima de la persona, quien siente que la única forma de acabar con el complejo es eliminándolos.

Así los problemas surgen cuando el aspecto de estos lunares es poco estético o están ubicados en una zona expuesta al roce, que incomoda.

Hay casos en que la decisión de extirpar es netamente médica. Esto sucede cuando se trata de lesiones atípicas o sospechosas de malignidad, ya que podría tratarse de un cáncer de piel.

øCómo se realiza la extirpación de un lunar?

Ya sea por motivos de salud o simplemente estéticos, la extirpación de un lunar es un procedimiento que se realiza generalmente en forma quirúrgica, a través de una cirugía menor.

La extirpación de un lunar es una intervención quirúrgica ambulatoria habitualmente sencilla que, en la mayoría de los casos, sólo requiere de anestesia local. Sin embargo, hay ocasiones en que es preferible utilizar anestesia general, como por ejemplo cuando el área comprometida es extensa o el paciente es muy pequeño o no colabora.

Se trata de un procedimiento prácticamente indoloro, quizás la única molestia que puede sentir el paciente es el pinchazo de la anestesia local, ya que luego la zona se `duerme’ y se hace insensible.

Tras la cirugía, la persona debe seguir las indicaciones médicas según cada caso, mientras que el reposo, dependerá de la magnitud y localización del tejido comprometido.

Si estás interesada o ya tomaste la decisión de someterte a una cirugía estética es importante que te preocupes de que el procedimiento lo realice un cirujano plástico acreditado, miembro de la Sociedad Chilena de Cirugía Plástica y Certificado por CONACEM, quienes no sólo realizan de forma correcta, ética y segura este tipo de procedimientos, sino que además monitorizan el postoperatorio para que los resultados que se obtengan sean los mejores.