Las Enseñanzas

Cuando quedé embarazada por segunda vez, pensé que en esta oportunidad todo sería más fácil. Sin querer otorgarle complejidad al primer embarazo, esta nueva experiencia venía más liviana. No existió ansiedad alguna y las expectativas estaban evidentemente más controladas. Eso me permitió en los primeros meses, tomarme el embarazo con un relajo y una comodidad insospechada.
Era evidente, lo “nuevo”, en un primer embarazo viene cargado de inquietudes, anhelos, fantasías, etc. que hacen de esa experiencia un momento único en la vida. Desde el primer día hasta el momento que vivimos porque todo es nuevo con ese primer hij@. Así, cuando recibimos la noticia del segund@, creí que podría cambiar, modificar o reevaluar lo que no hice con el primer@. No pude. Y es que comencé a vivir tantas diferencias entre los dos embarazos, que todo se volvió “nuevo” por segunda vez.
Más allá del detalle de ambas experiencias, lo significativo de todo esto es que cada hij@ es único, que viene al mundo y a nuestras vidas a enseñarnos algo distinto. Que hasta ahora, creía aprender día a día porque ser madre es eso: un aprendizaje. Pero lo cierto es que cada hij@ es una enseñanza tanto en lo espiritual, en lo emocional y en lo físico.
Esa tranquilidad de esta nueva experiencia me ha permitido ver con claridad esas enseñanzas y asumirlas como regalos de la vida. Vivir a conciencia las lecciones de la maternidad para fortalecer mi presencia en este mundo y estar mejor preparada para ayudar a mis hijos a enfrentarlo.

Mail: madrigueramagallanica@gmail.com • Twitter: @madrigueramag