El boom de las cafeterías en Punta Arenas

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En el último año, diversos cafés han abierto en la ciudad. Fem visitó cuatro de los mejores para contarte qué es lo que ofrecen y cuáles son sus respectivas historias.

Café Sarmiento y su vista panorámica a la ciudad

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 Tiene tres pisos, se encuentra en el Cerro de la Cruz y probablemente la panorámica de su buhardilla es la mejor de la ciudad. Café Sarmiento comenzó a funcionar el 30 de abril de este año.

“Tener algo propio era un sueño que comenzó hace muchos años. Siempre quise armar un negocio familiar y esta casa fue ideal para ello porque es un lugar con historia. Aquí se alojaron Los Jaivas en más de una ocasión”, cuenta Hernán Caro, quien junto con su esposa, Gloria Contreras, su mamá y su tía se asociaron y hoy le dan trabajo a seis personas.

Uno de los detalles que más llama la atención de la cafetería es que en ella el concepto de jefe no existe.

“Los chicos que atienden las mesas nos dicen ‘tío’ o ‘tía’. Tenemos buena gente, Todos los clientes que vuelven lo han hecho gracias a ellos porque para nosotros la atención es fundamental. Queremos que quienes nos visiten se sientan importantes”, comenta Hernán, quien también asegura que el éxito de Café Sarmiento se debe, en parte, a que “todo se hace con mucho amor y buenas energías. Aquí todos opinan, dan nuevas ideas y han puesto su corazón y dedicación en llevar esto adelante”.

Cada salón tiene características muy propias para que la gente se sienta cómoda y tenga privacidad. Los colores fueron elegidos cuidadosamente.

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“Esperamos que en la buhardilla, que es una de las preferidas por el público, se puedan concretar muchos noviazgos y amistades porque ese sector tiene algo muy especial”, manifiesta entre risas.

Hernán y Gloria piensan en grande. En el mediano plazo pretenden destinar el primer piso del local para vender chocolates. Sumado a ello, se encuentran analizando la posibilidad de extender sus horarios habituales para ofrecer otro tipo de alimentos, como por ejemplo, sushi.

“Lamentablemente la gente en Chile tiene el concepto de que el café se termina a las 20 horas. Sin embargo, al otro lado de la cordillera, en Argentina, las personas se quedan toda la noche y no hay problema. Nosotros apuntamos para allá”, concluye Hernán.

Café Sarmiento se ubica en Señoret 1080. Los horarios de atención son de lunes a sábado de 15.30 a 22.30 horas y los domingos de 15.30 a 21.00 horas.

 

 

 Café de Antaño: negocio en familia

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Durante once años, Marisol Inostroza fue dueña de Almacén de antaño, una tienda de antigüedades que se ubicaba en la esquina de Avenida Colón y O´Higgins.

Tras el cierre del local, Marisol siempre tuvo la idea de iniciar un proyecto nuevo. “Yo, hace rato, quería comenzar algo distinto y la idea de la cafetería era una buena alternativa. Lo hablé con mis hijos y mi marido y decidimos rescatar el nombre de mi antiguo emprendimiento para comenzar este. Fue así como decidimos ponerle Café de antaño”, comenta.

Un de los objetivos de sus dueños es ofrecer una alternativa distinta en una casa construida en 1927. “Reflejamos esto en el mobiliario y ambiente. En nuestra microempresa familiar, nos preocupamos de entregar un servicio de buenos productos y una atención acogedora a nuestros clientes. Además, vivimos aquí. En el primer piso atendemos y en el segundo, habitamos”, cuenta. El café empezó a funcionar el 6 de mayo y, según cuenta su dueña, desde entonces prácticamente todos los días se ha llenado.“Ha venido mucho público y estamos muy agradecidos de esto. Punta Arenas es una ciudad relativamente pequeña, la gente se pasa muy rápido el dato”, afirma.

Una de las recomendaciones de la casa es la once de antaño, que cuesta $6.900 y consiste en un trozo de torta, pastelitos, medio sellado, un jugo, y té, café o chocolate.

Café de antaño se ubica en Magallanes 324. Sus horarios de atención son de martes a viernes de 15 a 21 horas, y sábado y domingo de 15.30 a 21 horas.

 

 

Amelie: un sueño de años

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Desde que entró a estudiar gastronomía en el Ecole en Santiago, Javier Jabat, el dueño de Amelie, soñó con tener su propio salón de té. Después de hacer una especialización en pastelería en el Instituto Mariano Moreno Buenos Aires el 2012, volvió a Punta Arenas y decidió ingresar a la carrera de administración de empresa.

“Lo hice pensando en el futuro. Tenía ganas de armar mi propio negocio y no sabía cómo empezar, pero después de un largo proceso logramos abrir el 19 de octubre del año pasado”, cuenta.

Al principio, su idea fue instalar una pastelería para llevar. Para ello, arrendó una casa en la que decidió poner algunas mesas por si alguien quisiera sentarse. Sin embargo, ocurrió que el 50 por ciento de las personas que llegaban al lugar decidía quedarse a tomar café y el otro llevaba.

“Cuando nos dimos cuenta de esto, nos fuimos ampliando: empezamos a tener cosas saladas y poner más mesas. Inmediatamente, nos dimos cuenta de que la cafetería daría frutos”, resume.

La variedad de los productos que ofrece el lugar es amplia. Existen diferentes tipos de tortas, cheescake y küchen. Además, es posible encontrar preparaciones sin azúcar. Sin embargo, la última novedad de la cafetería son los picarones.

Amelie se ubica en Vicente Reyes 803. Los horarios de atención son de martes a domingo desde las 16 a las 20.30 horas.

 

La apuesta centenaria de Kruh i Kava

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Abrieron sus puertas el 1 de septiembre de 2014, pero la historia del lugar comenzó hace más de un siglo. En 1914, Pablo Musac y su esposa Margarita Mimica fundaron Panadería Universal. El matrimonio comenzó con un horno pequeño a preparar el tradicional pan de la época. Poco a poco, el negocio fue creciendo, por lo que se vieron obligados a construir un gran horno a leña e instalar maquinarias y equipos traídos en barco desde Europa, la única opción de la época.

Luego de la muerte de Pablo, Margarita asumió el liderazgo del negocio. Cuarenta años después, Amelia, una de sus hijas y quien también tenía un profundo amor por la cocina, tomó la administración del local hasta el día de su fallecimiento en 2010.

Tras ello, Cristina Mac Kay Musac, hija de Amelia, se asoció junto con su esposo e hijos para crear un plan de negocio que diversificara el rubro de panadería y lograra crear una nueva imagen. Fue así como nació Kruh i Kava, que en croata significa “Pan y Café”. El local actualmente posee cafetería, fábrica de empanadas, pasteles y postres.

“Hoy contamos con casi mil metros destinados a la industria alimenticia”, cuenta Boris Miranda, hijo de Cristina y uno de los dueños de la cafetería.

Pero, ¿cuáles son los principales productos que ofrece este lugar? Aquí se pueden encontrar más 60 tipos distintos de pan, principalmente en base a masa blanca, centeno, integral y multigrano. Sumado a ello, hay 12 variedades de tortas, 12 de empanadas y siete de postres.

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Una de las delicias más destacadas de Kruh i Kava son los “Queques Granny”, una receta familiar traída desde Escocia a principios del siglo pasado y que fue traspasada de generación en generación.

Los desafíos de la cafetería son grandes: actualmente están también en el hall central de la Clínica Magallanes y próximamente comenzará a funcionar una tercera sucursal en el edificio 2 del proyecto automotriz de Neumáticos San Jorge en plena Avenida Bulnes.

“Estamos muy contentos con los resultados que hemos tenido. Nunca pensamos que en menos de un año tendríamos tres locales”, asegura Boris.

Kruh i Kava se ubica en Magallanes 269. Los horarios de atención son de lunes a sábado 8 a 20 horas.