Cigarrillo y los daños en su rostro: ¡No fume!

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Dr. Mauricio Vargas Zec, Cirujano Máxilo Facial, mvargas@drmvargasz.cl

Para la Organización Mundial de la Salud, el tabaco es la primera causa de invalidez y muerte prematura en el mundo. Está directamente relacionado con la aparición de 29 enfermedades, de las cuales 10 son diferentes tipos de cáncer y de más del 50 % de las enfermedades cardiovasculares.

Fumar es directamente responsable de aproximadamente el 90 % de las muertes por cáncer de pulmón y aproximadamente el 80-90 % de la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) y enfisema.

El fumar es la causa más frecuente de muertes que pueden evitarse.

En el año 2004, la Organización Mundial de la Salud estimaba en 4,9 millones el número de muertes anuales relacionadas con el consumo de tabaco. Pese a existir una probada relación entre tabaco y salud, esto no impide que sea uno de los productos de consumo legal que puede matar al consumidor asiduo.

Fumar un solo cigarrillo da lugar a una elevación del ritmo cardíaco, la frecuencia respiratoria y la presión arterial. El humo produce una reacción irritante en las vías respiratorias, la inflamación continua produce bronquitis crónica. También es causa de disminución de la capacidad pulmonar, produciendo al fumador mayor cansancio y disminución de resistencia en relación a un ejercicio corporal.

Durante el embarazo, el tabaco multiplica su potencial dañino generando no sólo riesgos para la fumadora, sino también para el bebé, entre otros riesgos aumentan los de sufrir embarazo ectópico, hemorragias, alteraciones cardíacas, o en el bebé riesgo de nacer con bajo peso, insuficiencias respiratorias, riesgo de padecer muerte súbita, infartos o leucemia infantil.

El tabaco se ha relacionado con diferentes cánceres: cáncer de pulmón, laringe, orofaringe, esófago, estómago, páncreas, hígado, colon, recto, riñón, vejiga, mama, aparato genital, linfático.

Además tiene efectos muy dañinos en la piel y el rostro: causa el efecto de envejecimiento precoz y aparición de arrugas faciales. Igualmente un estudio detectó que el 42,2 % de las personas adictas al tabaco desarrollaron acné; otros estudios confirmaron que causa ojeras y bolsas debajo de los ojos. Todo esto causado por el estrechamiento de los vasos sanguíneos, con la disminución de la irrigación sanguínea necesaria para mantener la piel joven y saludable. El cigarro también afecta el cabello, haciendo que se adelgace y que las canas aparezcan a más temprana edad.

Y por supuesto recordemos las evidentes manchas en los dientes y su coloración amarillenta.

¿Qué espera para dejar de fumar?